
Los dos últimos fines de semana los hemos pasado de una manera diferente. Hemos cambiado el bar, el cine y la bendita lectura por La Nao, en Pozoblanco, donde hemos impartido el taller para emprendedores ‘Generación, gestión y difusión de contenidos en Redes Sociales’. Para nosotros el resultado ha sido excepcional.
En principio, el curso iba a llevarse a cabo únicamente durante una jornada, pero el interés de los emprendedores del Valle de los Pedroches hizo que tuviéramos que repetirlo —gracias a todos— y aún así se han quedado personas en la lista de espera. No os preocupéis, repetiremos muy pronto.
En el taller presentamos algunas técnicas y consejos para mejorar el posicionamiento de empresas, marcas y productos en la Red. ¿Cómo? A través de sencillas herramientas para el trabajo en Social Media y descubriendo las muchas posibilidades de generación de contenidos que están al alcance de la mano de cualquier emprendedor.
Durante tres horas (que se nos pasaron volando) disfrutamos profundizando en la generación de contenidos para Internet, compartiendo las posibilidades de sacar partidos a estos contenidos, contando los secretos de Facebook, Twitter, Instagram y YouTube. Y todo eso dejando claro que, afortunadamente, Internet es imprevisible y el Social Media no es una ciencia exacta. ¡Qué aburrido sería si no!
Un maquilladora,varios fotógrafos, una maestra de danza, una abogada, algunos profesores, técnicos en medioambiente, una sexóloga, una especialista en turismo, un ganadero y muchos más nos han acompañado y han escuchado nuestros consejos. Y, por supuesto, nosotros también hemos aprendido con ellos. De eso se trata en esto del Social Media: de compartir para crecer todos juntos.
A todos ellos tenemos mucho que agradeceros, porque con personas así el trabajo se convierte en un juego y recordamos aquello que decía nuestro querido Steve Jobs:
Cada día me miro en el espejo y me pregunto: «Si hoy fuese el último día de mi vida, ¿querría hacer lo que voy a hacer hoy?». Si la respuesta es «no» durante demasiados días seguidos, sé que necesito cambiar algo.
Esta mañana nos hemos mirado en el espejo y la respuesta ha vuelto a ser «sí». Gracias a todos.
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